¿Cuánto Debe Durar Mi Curso De E-Learning?

Hacer que los cursos tengan la duración "correcta"

A menudo me preguntan cuánto tiempo debe durar un curso e-learning. Mi respuesta rápida es que debería durar lo suficiente para cumplir sus objetivos. A primera vista, no es una mala respuesta, pero suele ser una que no satisface a ninguno. Hay variables a la hora de determinar la duración de un curso e-learning.

Sin embargo, aquí hay algunos consejos que pueden ayudar a responder la pregunta.

Divide tu contenido

La tendencia en el aprendizaje En línea es en trozos pequeño y digeribles. Algunas personas lo llaman aprendizaje de YouTube o microaprendizaje. Me gusta llamarlos coursels (como en bocados de curso).

La tendencia tiene sentido. Cada vez usamos más y más dispositivos móviles donde el entrenamiento rápido funciona mejor y el contenido fragmentado es más fácil de procesar. Al fragmentar el contenido, también tienes un entorno de producción más ágil. Los módulos son más fáciles de actualizar y modificar; y son más fáciles de reubicar para crear soluciones de aprendizaje personalizado.

En cuanto a la duración del curso, con la fragmentación puede ser determinada por el alumno y no por el contenido. Es posible que algunas personas solo necesiten una parte para cumplir con sus objetivos de aprendizaje, mientras que otras pueden necesitar más.

Espaciar los eventos de aprendizaje

Hay mucha evidencia que sugiere que el espaciado de los eventos de aprendizaje a lo largo del tiempo puede mejorar los resultados del aprendizaje. Algunas organizaciones crean cursos que son implementados a través de una larga duración. Los primeros cursos introducen los conceptos generales y luego, con el tiempo, el aprendizaje se refuerza a través de diversas actividades que requieren recordar y aplicar.

Hace años, creamos un programa de capacitación en el que teníamos algunos cursos básicos que destacaban las expectativas de desempeño específicas de la organización. Y luego programamos una serie de desafíos de seguimiento que requerían que el alumnado procesara varios escenarios (usando lo que aprendieron) y luego discutiera sus soluciones con sus gerentes.

También hay una forma efectiva de espaciar el entrenamiento durante un periodo de tiempo más corto en una sesión única. La idea principal es presentar el contenido del curso tres veces divididas por descansos de diez minutos. Podría verse así:

1. El instructor presenta el contenido
2. Actividad de descanso de 10 minutos
3. Los estudiantes recuerdan el contenido
4. Actividad de descanso de 10 minutos
5. Los estudiantes aplican el contenido a demostrar comprensión.

No he visto este enfoque aplicado al aprendizaje en línea, pero puedo ver cómo este contenido podría funcionar en un entorno mixto donde la instrucción en tiempo real se mezcla con el contenido en línea. En cualquier caso, fragmentar el contenido y espaciar la forma en que se imparte cambia nuestra comprensión de cuánto tiempo debe durar un curso.

Estar centrado en el alumno

Uno de los grandes beneficios de los cursos de e-learning es que es asíncrono, lo que significa que no está limitado por la geografía o el tiempo. Eso le da al alumno la flexibilidad de tomar el curso en el momento que más le convenga.

Otro beneficio es que el aprendizaje es a su propio ritmo, lo que se relaciona directamente con la pregunta de cuánto tiempo debe durar el curso. Una persona experimentada puede aprender mucho más rápido que una persona nueva. Por lo tanto, la duración del tiempo es irrelevante.

Aprovecha lo que proporcionan los cursos de e-learning para crear un entorno que funcione mejor para el alumno/a.

A continuación se ofrecen algunos consejos:

• Dales razones para explorar el Contenido del curso.
• Pídeles que demuestren comprensión como una medida de éxito.
• Proporciona muchos recursos y guías para reforzar lo que están aprendiendo.
• No bloquees la navegación. Deje que naveguen por el curso como deseen.

El número de diapositivas es irrelevante

Cuando las personas preguntan acerca de la duración del curso, también preguntan cuántas diapositivas o pantallas debe tener el curso. Algo de esto probablemente proviene de la mentalidad de presentación en la que cada diapositiva representa X minutos y si tienes una presentación de 30 minutos, estás limitado a X diapositivas.

Sin embargo, cuando se trata de cursos de e-learning, el recuento de diapositivas es irrelevante. El alumno/a mira una pantalla, no mira diapositivas. Puedes poner cinco piezas de información en una sola diapositiva o distribuir esa misma información en cinco diapositivas. Para el alumno/a no hay diferencia.

Básicamente, la pantalla muestra contenido—principalmente texto y algún tipo de recursos audiovisuales como imágenes y formas. Ese contenido cambia a lo largo del curso. ¿Importa si el contenido cambia a nivel de diapositiva con capas o saltando a nuevas diapositivas? El usuario final solo sabe que lo que se muestra cambió. Realmente no les importa cómo hiciste que cambiara.

Todo se trata de cumplir tus objetivos de aprendizaje

Todos llegamos a aprender con diferentes experiencias y niveles de comprensión. Algunas personas pueden aprender nuevo contenido rápidamente, mientras que otras pueden necesitar más actividades y retroalimentación. Los cursos de e-learning son perfectos para este enfoque porque son flexibles y se pueden adaptar a las necesidades y el progreso del alumno/a.

Sin embargo, cualquier curso que construyas es solo una solución para cumplir objetivos específicos. No creamos cursos de e-learning solo por crear cursos. Los construimos para satisfacer necesidades específicas. Por lo tanto, enfocarte la mejor longitud para un curso es un poco equivocado y le pone atención a algo irrelevante. En última instancia, necesitamos determinar qué intervención de nuestra parte ayuda al alumno a cumplir con las expectativas de aprendizaje.

Si los consejos anteriores no funcionan para ti, entonces la siguiente mejor respuesta es "15 minutos". ¿Cómo determinas tú la duración del curso?